Distancia 11 km por la nacional N-110 dirección Soria, situado en el límite de las provincias de Salamanca, Cáceres y Ávila, al suroeste de ésta, siendo cabeza natural de la comarca formada por los Valles del Tormes y del Aravalle, más conocida como Alto Tormes. Al hallarse en las inmediaciones de la Sierra de Gredos, su clima es continental alpino, con inviernos fríos y veranos suaves.
Discurre el Tormes, importante afluente del Duero, por esta población, sobre sus aguas un puente románico de la Edad Media que al cruzarlo, conduce a la ermita del Cristo. Entre el río y la montaña el Castillo de Valdecorneja, del Siglo XV, cuando el señorío del mismo nombre pasa a formar parte de la Casa de Alba. El Barco conserva parte de su muralla, y con historia y leyenda cuenta El Arco del Ahorcado. La Iglesia parroquial de La Asunción de Ntra. Sra. hace pensar que algún maestro abulense de principios del Siglo XIV tuvo que ver en su construcción, ya que recuerda a la Catedral de Ávila. Lo más destacado es el coro. Cuenta El Barco con dos salas de exposiciones: la Cárcel antigua y la Casa del Reloj. La Iglesia de San Pedro del Barco se ha construido sobre la casa en la que el santo nació en 1080.
El Puente Viejo
Es comúnmente llamado 'puente viejo'. No se sabe bien la época en la que se construyó el primer puente alzado en este lugar por los romanos, necesario para el tránsito de las calzadas. Pero es seguro que debido a tantas guerras y ataques sufridos tuvo que ser reconstruido en el siglo XII, adoptando así su actual estilo románico.
Aun así, el puente ha seguido cambiando desde entonces, pero todavía se puede reconocer en su forma la arquitectura romana, con sus siete arcos desiguales y sus anchas pilas de sillares almohadillados. El puente es alomado con una cuesta de subida y bajada. Hasta el siglo XIX tuvo en su centro una torre defensiva, pero ésta fue destruida junto con toda la parte central en la Guerra de la Independencia por las tropas francesas. Diez años más tarde el puente fue reconstruido. La torre quedo sumergida en el río, pudiéndose observar vestigios de ella en las inmediaciones del charco de las tenerías.
Iglesia de la Asunción
Desde la Plaza de las Acacias, dejando atrás la ermita de San Pedro y a la izquierda el Hospital de San Miguel (hoy Residencia de la 3ª Edad), se puede apreciar el conjunto de granito que forma la Iglesia con su torre adyacente. A la derecha, el ábside, coronado por la espadaña – con campana – del "reloj suelto", rompe su estructura poligonal y presenta una pared lisa y recta que alberga la sacristía y la Sala Capitular, hoy museo de la parroquia.
Adentrándose en el atrio, de tiempos recientes, y se puede mirar el gran cubo de la torre. Fue construida en la misma época que las naves de la iglesia, en un claro estilo románico. En la fachada sur, se encuentra la puerta principal, un arco apuntado rodeado de dos contrafuertes, bajo una cornisa de modillones que nos habla, quizá, de un resto de defensa militar.
Ya dentro de la iglesia podemos apreciar su planta basilical, con las tres naves rematadas hacia oriente por los ábsides poligonales, sustentados por los contrafuertes exteriores e iluminados por varios ventanales ojivales.
Cuenta con un grandioso retablo barroco de fines del siglo XVII, que se adapta a la forma poligonal del ábside.
La Capilla del Inquisidor, dentro de esta Iglesia, se denomina así por un inquisidor de este pueblo que está enterrado en la misma. También en esta capilla se hallan los restos de algunos nobles originarios de este pueblo.
Calle de La Gallareta
Es la calle más corta y estrecha del pueblo. Se denomina así porque en su ámbito se hallaban granjas de hermosos gallos reproductores. Fue conocida también por "el Callejón de los Combates", donde dejaron la vida invasores franceses y combatientes españoles.
Casa del Reloj
Fue una antiquísima Casa Consistorial que se derribó en el siglo XVIII. Se alzó de nuevo con paredes de piedra labrada y mampostería de inconfundible traza castellana, Sobre el balcón que da al "Arvejo", se colocó el Reloj, de la Villa, que da nombre al edificio, y la torreta metálica que sostiene su campana.
Actualmente está instalada la oficina de Turismo con antiguos sillones pertenecientes al Ayuntamiento. En la planta superior, además de poder observar el mecanismo del reloj, se pueden contemplar distintas exposiciones.
Ermita del Santísimo Cristo del Caño
Tiene una tradición muy antigua.
Por el siglo XIII, una gran crecida del Tormes arrastró, no se sabe desde dónde y dejó orillado a la izquierda del río por encima del puente, un Cristo de madera de tamaño natural.
Lo vieron unos caminantes y junto a la gente del pueblo lo condujeron en procesión a la iglesia parroquial, donde se dejó. A la mañana siguiente volvió a aparecer en el mismo sitio, lo llevaron de nuevo a la iglesia. Al día siguiente ocurrió igual.
La gente se convenció de que quería permanecer a la entrada del Puente y allí le erigieron una ermita, denominada del Humilladero inicialmente.
Cuatro siglos después se declaró ruinosa y en el siglo XVII (1672) se reconstruyó. Al hacer los cimientos surgió una corriente de agua que se recogió en una fuente de 3 caños. Desde entonces empezó a llamarse a la fuente y al Cristo del Caño.
Hay fiestas en su nombre, el primer domingo de septiembre y viernes y sábado anteriores. Se lleva al Cristo en solemne procesión por el pueblo hasta la Iglesia Parroquial, lugar en el que permanece hasta el último domingo de octubre, fecha en que se devuelve la imagen a la ermita.
Castillo de Valdecorneja
Situado dominando el río y el puente, es el punto más elevado del valle.
Construido sobre un castro vetón que fue destruido por los romanos. Fue edificado en el siglo XII y reconstruido en el siglo XIV. Su perímetro es cuadrado, la superficie puede calcularse en 1.700 m2 sin tener en cuenta las dependencias desaparecidas como el foso y contrafoso, el rastrillo, el palomar, las caballerizas...
Al iniciarse la segunda mitad del siglo XIX quedó habilitado como cementerio municipal. Por ello aumentó su deterioro al arrancar el pavimento y grandes oquedades en sus muros.
Actualmente ha sido restaurado y reparado el pavimento y en parte la torre del Homenaje. Es utilizado para los actos culturales que se celebran en esta localidad.
Edificio de la Cárcel
El asocio de Villa y Tierra compró a la Parroquia en el año 1652 un par de casas en la Calle Mayor para edificar la cárcel. En tiempos remotos se metía a los presos en la casa del Concejo y siglos más tarde en una de las dependencias del Castillo.
Es un inmueble de gran solidez en que destacan su amplia escalera de piedra, la alta portada, las rejas, los dos balcones.
En ella tuvo su sede el Juzgado de 1ª Instancia. Actualmente ya está restaurado, alberga el Aula Mentor, la Biblioteca Municipal, el Consejo Regulador de la Denominación Especifica de la Judía del Barco y tres amplias Salas de Exposiciones.
Casa de Los Balcones
Situada en la Calle Mayor. Se la llamó así por ser la primera casa del pueblo que poseía balcones.
Tiene la fachada característica de una casa de principios del siglo XV, con puerta de medio punto y grandes dovelas que recuerdan las de la muralla y del Castillo. Tiene 3 rejas con hierros repujados con águilas y bichas. Hay 3 balcones y una de las ventanas es de arte castellano puro. Fue casa de la Inquisición.
Casa de Recaudación
Posee tres grandes ventanales, en lo que se llamó “Carnicería alta” y fue conocido como Fielato. Son de finales del siglo XIV. Embellecidos por columnas de granito de auténtico sabor castellano.
Puede contemplarse en la Plaza y en la Calle Mayor.
Ermita de San Pedro del Barco
Templo construido en 1663 en el mismo lugar en que nació San Pedro del Barco en 1088.
En el año 1149 regresó al Barco con su amigo San Pascual, natural de Tormellas. Como estaba muy viejo buscó a un mozalbete para que lo ayudara. la tradición y la leyenda dicen que pidió al Señor que le diera a conocer el momento de su muerte. Le anunció que sucedería cuando el agua de la fuente en que bebía se convirtiese en vino. En octubre de 1155, San Pedro tuvo sed y pidió al muchacho le trajeses un poco de agua, al probarla observó que era vino. A los 3 días murió.
San Pedro fue enterrado en la Basílica de San Vicente en Ávila. Al fallecer el Santo eran muchos los pueblos y ciudades que querian quedarse con el cuerpo, por este motivo se decidió montar el cuerpo en una mula y dejar que la misma fuese donde le pareciese bien y allí donde se parase sería donde se quedaría el Santo. La mula se paró en la Basílica de San Vicente y dando un fuerte golpe con una pata en una piedra dejó marcada su herradura - aun hoy se puede ver la piedra con la marca- muriendo a continuación por lo que San Pedro del Barco fue enterrado en la citaba Basílica de San Vicente de la ciudad de Ávila.
Murallas
Las murallas, como se puede observar por sus restos, partían del Castillo y rodeaban el viejo pueblo del Barco.
El trazado actual es del siglo XII y se debe su edificación igual que las de Ávila, Salamanca y Segovia a D. Ramón de Borgoña, marido de la primera señora de Valdecorneja. La planta de las mismas es pentagonal.
Tenía dos puertas románicas, la del Campillo o de la Horcajada, actualmente derribada, y la de Piedrahíta o del Ahorcado, reconstruida; con arco de medio punto y torres avanzadas para su defensa.
Existían también dos puertas más: una enfrente de puente románico, la puerta del Puente, y la otra la puerta de la Villa denominada de la Ribera o de la Regadera. Poseía además tres postiguillos: el postiguillo del río casi enfrente de la Torre de la Iglesias, también denominado Postigo de la Gallareta, con escalera de bajada, y frente al Hospital el Postigo de la Regadera o del Hospital o del Batán y en la Calle del Río.
La muralla dejaba paso a la Regadera de la Villa por un diminuto arco de herradura ya desaparecido. Tenía para su defensa varios cubos o torres avanzadas distribuidas a lo largo del trazado de la muralla.
Puerta del Ahorcado
Confluencia del Cordel de Extremadura con la Calle del Pozo.
Única puerta de la muralla que permanece en pie, posee un estilo románico, aunque fue reconstruida en el siglo XVI.
Inicialmente se denominaba Puerta de Piedrahíta o de Ávila. Hasta que en el siglo XVI ocurrió el hecho que hizo cambiar su nombre. Fue ahorcado en ella un alcalde bastante impopular. Desde entonces siempre se llama a esta Puerta la del Ahorcado.
Casa de Los Gasca
Chaflán del siglo XV, compuesto por asientos, columnas y monolitos. Presenta una silueta alargada hacia lo alto. La puerta de orden clásico está protegida con un bello cornisamiento, el balcón de arco conopial florenzado remata con el escudo de los González Dávila.
Esta fachada tuvo cadenas indicativas de que había sido visitada por los reyes. Se derribó hace unos años, pero se volvió a erguir dentro del recinto el Colegio "Juan Arrabal".
Fue la casa solariega de Pedro de la Gasca, clérigo, y miembro del Consejo Supremo de la Inquisición.
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